Viktor Frankl (Ilustrado por Jack Cortes)
La Psicología Perenne es un camino para devolver la merecida alegría y libertad a cada ser. Para esto, hemos acudido a los tesoros que las tradiciones ancestrales nos han ofrecido hasta el día de hoy, al ser fuentes de un conocimiento profundo y práctico que nos orienta hacia una felicidad y armonía permanente que constantemente estamos tratando de alcanzar. Además, la Oidaterapia ha recibido valiosos aportes de la Logoterapia, fundada por Viktor Frankl, donde a través de una maravillosa propuesta terapéutica nos inspira a indagar sobre la influencia de la fe en el área del sentir, pensar y desear, así como en el valor de la fe saludable que nos impulsa a encontrar un propósito de vida trascendente.
La Psicología Perenne incorpora en su análisis el ámbito físico, mental/emocional e intelectual relacionado con la existencia humana, la dimensión espiritual y la trascendencia del ser en comunión con lo Supremo, proponiendo estas últimas como variables para la investigación científica. La Psicología Perenne extrae de la psicología su comprensión etimológica respecto al ‘alma’ y de lo perenne la idea de aquello que ‘nunca perece’ y que desde una comprensión filosófica, se refiere al conjunto universal de principios, verdades y valores comunes a todos los pueblos y culturas del planeta que han trascendido el tiempo y el espacio como son el amor, el respeto, la compasión, la solidaridad, etc.
Así mismo, la Psicología Perenne da gran importancia a la contribución que los cultos ancestrales han hecho al campo de los valores perennes y de la fe, constatando que la existencia humana esta llena de experiencias místicas que se han manifestado a lo largo de todos los tiempos y en todas las culturas. Pues un sustento espiritual es una de las necesidades más persistentes y profundas del ser.
Psique (Fotografía de César David Martínez)
La Psicología Perenne busca el bienestar y la salud del ser, abordando el sentido real de nuestra existencia e identificando su desconocimiento como la causa de nuestro malestar y aflicción. El ser humano es una unidad de conciencia individual, poseedora de una condición singular y única respecto a una dimensión Suprema. La Psicología Perenne reconoce que más allá de esta existencia condicionada al cuerpo físico, al tiempo y al espacio los seres humanos somos seres trascendentales expresándose en diferentes estados de conciencia. Por lo tanto, éste es el estudio del camino que emprende el alma condicionada para alcanzar la trascendencia, donde se analizan las causas y efectos que existen en la relación de nuestra conciencia con nuestras dimensiones física, mental, intelectual y trascendental.
En este recorrido del ser que revela la grandeza de la fe que reside en nuestro interior, la conciencia es un regalo supremo que nos permite conectar las causas y efectos de todas las circunstancias. La Psicología Perenne expone la sanación como el proceso de toma de conciencia para entender las causas de nuestras aflicciones y enfermedades, ya que al momento de entender las causas, automáticamente podremos conocer las soluciones. A esto le llamamos el camino hacia la fe sanadora.